JORDANIA INSTA A ABBAS A REPENSAR LA DECLARACIÓN EN NACIONES UNIDAS

Ynet, 31 de agosto de  2011

El periódico saudita Arabia al-Madinah dice que Amman trato de convencer a Ramallah para retirar su petición de reconocimiento de Naciones Unidas, temiendo que esos movimientos unilaterales puedan comprometer el derecho al retorno de los palestinos.

Por Roee Nahmias

Jordania solicitó al presidente palestino Mahmoud Abbas su reconsideración del próximo pedido de reconocimiento ante Naciones Unidas, informó, este martes, el periódico saudíta Arabia, al-Madinah. De acuerdo con el informe, Jordania considera peligroso el movimiento y que comprometería la reafirmación del derecho al retorno de los palestinos.  

El periódico saudí dijo que Amman “aconsejaba” a Abbas - a través de varios canales diplomáticos dentro del mundo árabe- no hacerlo agregando que, hasta el momento, el presidente palestino eligió negar la importancia de la recomendación de Jordania y sigue adelante con el plan de petición ante la Asamblea General de Naciones Unidas.

El movimiento unilateral de la Autoridad Palestina es percibido como sumamente prematuro y perjudicial para muchos de la comunidad internacional y, en particular, para Washington, que ya declaró su oposición. Varios informes sugieren que Abbas está buscando, de manera encubierta, modos para incumplir la cercana declaración, pero, los palestinos, insisten en llevarla adelante.

Si lo hicieran, la Asamblea General- dirigida por países del Tercer Mundo, predominantemente árabes y musulmanes- tendrá un voto mayoritario a su favor. Sin embargo, las resoluciones de la Asamblea General son simbólicas y para ser, en verdad, aceptado dentro de Naciones Unidas, el Consejo de Seguridad- donde EEUU tiene poder de veto- debería conceder la declaración palestina.

Ramificaciones legales

Israel ya reconoció que no tiene opción real de frenar el voto en la Asamblea General y, ahora, concentra sus esfuerzos diplomáticos en establecer – dentro de Naciones Unidas- una “mayoría moral” para votar contra la declaración.  

Jerusalén está, hoy, focalizándose en el apoyo de Gran Bretaña, Francia, Alemania y España, para mencionar algunos, con el objetivo de crear un bloque de 30 naciones.

Amman no es el único afectado por el derecho al retorno: la AP consiguió la ayuda de varios expertos legales internacionales en un intento de entender, por completo, las ramificaciones legales del apoyo de la Asamblea General para su declaración.

El reconocido legalista Prof. Guy Goodwin-Gill de la Universidad de Oxford, uno de los expertos consultados, confirmó, según se informa, que la declaración de la AP podría comprometer, de hecho, el derecho al retorno.

Fuentes en Ramallah parecían inmutables ante la poco auspiciosa propuesta, diciendo que otros expertos contradijeron a Goodwin-Will, asegurando a la AP que no habrá daño alguno a las futuras demandas concernientes al derecho al retorno.

Informes recientes, que sugieren que los palestinos deberían modificar su declaración a una que solicite, a Naciones Unidas, mejorar su status de observador a cambio de incentivos para la Unión Europea, fueron desestimados por Jerusalén como provocación.

El Ministro de RREE solicitó a todas las misiones israelíes en Europa aclarar que la nueva – y hasta el momento no-confirmada- iniciativa palestina, que está siendo “comercializada” como un compromiso, por parte de Ramallah, no es sino una treta que pretende ejercer dominio sobre el voto de las naciones - miembro, aun indecisas, de Naciones Unidas.

El Ministro de RREE advirtió que aun el “mejoramiento” en Naciones Unidas- que será que la AP goce de un status similar al del Vaticano- le permitirá convertirse en un miembro activo de todos los organismos de Naciones Unidas, incluyendo la Corte de Crímenes Internacional; movimiento que posibilitará buscar un recurso legal contra altos representantes israelíes.

Mientras tanto, el director del Comité de Asuntos Extranjeros (House Foreign Affairs Committee) solicitó al Congreso bloquear fondos estadounidenses a toda entidad de Naciones Unidas que apoya el otorgar, a Palestina, de un status elevado en Naciones Unidas.

La congresista republicana Ileana Ro-Lehtinen está buscando prohibir las contribuciones estadounidenses al Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas y a la conferencia anti-racismo vista como plataforma para la retórica anti-Israel. Ros-Lehtinen fue, durante años, crítica de Naciones Unidas. La legislación que presentó este martes podría, además, retener una porción de los pagos de EEUU al organismo internacional si no cambia su sistema de financiamiento de manera que, esas retenciones, sean pagadas sobre una base voluntaria más que gravada. Expresó que Naciones Unidas continúa siendo asediada por el escándalo, el desmanejo y la inacción.

Associated Press e Yitzhak Benhorin en Washington contribuyeron en este informe.